¿Qué es la placenta?

La placenta es un órgano generado por el cuerpo de la madre en el momento en que la mujer se embaraza. Se forma dentro del útero y forma un rol esencial proveyendo de oxígeno y nutrientes al bebé en crecimiento. También elimina los desechos de la sangre del bebé. La placenta se une a la pared del útero, y de ahí surge el cordón umbilical del bebé.

Los mamíferos no tienen un plan, ellos consumen su propia placenta por instinto, sabiendo que los repondrá y reforzará después del nacimiento. 

Todos los “mamíferos placentarios” tienen una placenta. Hay diversos grupos de ballenas, elefantes, musarañas y armadillos. Ellos son también algunos de los organismos mas familiares para nosotros, incluyendo mascotas como perros y gatos, así como muchos animales de granja y de trabajo, como los borregos, vacas y caballos. Placentofagia es la práctica de comer la placenta después del parto. La mayoría de los mamíferos hacen esto debido al conocimiento instintivo de los incomparables beneficios para la salud posparto de esta práctica. 

¿Qué hay dentro de la placenta?

¿Es beneficioso comer la placenta?

Para resumir, sí. La placenta tiene muchos beneficios para la salud. Este órgano está formado por diferentes componentes los cuales son súper beneficiosos para la nueva madre y el bebé, pero centrémonos en estos específicos: células madre, hormonas, minerales y hierro. 

Primero, la caída hormonal posparto, se considera el cambio hormonal femenino repentino más grande en el menor tiempo posible para cualquier ser humano, en cualquier punto de su ciclo de vida. Para hacer esta caída menos dramática, se ha observado que consumir dosis menores de esas hormonas ayuda a las mujeres a tener una “bajada” más suave después del parto. La placenta produce dos hormonas esteroides - estrógeno y progesterona… La placenta también libera varias hormonas proteicas, que incluyen gonadotropina coriónica humana (hormonas secretadas por la hipófisis que estimulan la actividad de las gónadas), lactógeno placentario humano (que estimula la producción de leche), hormona de crecimiento placentario, relaxina (la cual relaja articulaciones y ligamentos) y kisspeptina (gen supresor que suprime el melanoma y la metástasis del cáncer de mama).

En segundo lugar, la placenta está llena de células madre. Sabemos que las células madre generan células sanas para reemplazar las células enfermas (medicina regenerativa). Las personas que podrían beneficiarse de las terapias con células madre incluyen mujeres posparto, ya sea que hayan tenido un parto vaginal o cesárea, personas con lesiones en la médula espinal, personas con diabetes tipo 1, enfermedad de Parkinson, esclerosis lateral amiotrófica, enfermedad de Alzheimer, enfermedades cardiacas, accidentes cerebrovasculares, quemaduras, cáncer y osteoartritis. ¡Increíble!

En tercer lugar, los estudios médicos muestran que los niveles de minerales en las placentas son altos, especialmente de sodio, potasio y fósforo. Los resultados de este estudio sugieren que se enriqueció la cantidad de nutrientes, particularmente proteína y minerales en las placentas humanas deshidratadas con calor. Increíble, acabas de crear tus propias multivitaminas. 

Por ultimo, Hierro. Los glóbulos rojos contienen hemoglobina, una proteína que transporta oxígeno a todas las células del cuerpo. Nuestro cuerpo necesita hierro para producir hemoglobina. El hierro les da a los glóbulos rojos su color. 

La placenta vive dentro del saco amniótico con el bebé 

¿Cómo funciona la encapsulación de la placenta?

¿Qué le pasa a la placenta después de tener al bebé?

Si estás planeando encapsularla, un especialista capacitado recolectará la placenta después del nacimiento. La placenta es analizada en un espacio de preparación, previamente higienizado y apto para su uso alimentario, se drena la sangre, se deshidrata, se pulveriza y finalmente se coloca en cápsulas ya sea veganas o de gelatina. El proceso tarda de 2-3 días. 

Si decides no “quedarte” con tu placenta, normalmente un hospital la conservará y la revendrá a compañías de terapia con células madre. Los componentes aislados de la placenta, como la sangre del cordón umbilical y la membrana amniótica, ya están desempeñando un papel valioso en la medicina actual. La investigación continúa desarrollando el valor terapéutico de otros componentes de la placenta. Lo que es increíble, es que si decides tener el parto en un hospital o centro de maternidad y no deseas quedártela, simplemente la tirarán como desecho bio infeccioso. ¡Qué lástima!

¿Qué suministros se utilizan y cómo se almacenan y desinfectan?

Los suministros que utilizamos durante el proceso de encapsulación son todos de acero inoxidable y plástico de grado alimenticio. Todo el equipo se lava con agua caliente jabonosa y es esterilizado con solución de cloro después de cada uso. El área de preparación se limpia y desinfecta por completo con una solución de cloro antes y después del procesamiento de la placenta. Todo el equipo se lava a fondo y desinfecta después de su uso. 

¿Si me hacen una cesárea puedo encapsular mi placenta?

Si, absolutamente. Hable con su médico para que sepa que planea llevarse la placenta a casa. 

¿Qué necesito proporcionar para el procesamiento de mi placenta?

Eyla Cuenca Birth le proporcionará todos los materiales necesarios para la preparación de la placenta. Lo único que necesita es su placenta. 

¿Cómo se debe manipular o tratar desde el momento del nacimiento hasta el momento de su procesamiento y preparación?

Si va a tener un parto en el hospital, pídale a su enfermera que empaque con bolsa doble la placenta en una bolsa de riesgo biológico o ziplock; o en un recipiente de plástico proporcionado por el hospital. Recomendamos traer dos de sus propias bolsas con cierre hermético y/o un recipiente de plástico para guardar alimentos. Aunque los hospitales suelen tener recipientes para la placenta, no confíe en el hospital para que le proporcione lo anterior. La placenta debe colocarse en hielo y refrigerarse dentro de las 2 horas posteriores al parto. Lleve una hielera al hospital para mantenerla fría con hielo después del parto. Póngase de acuerdo con un amigo o familiar para que transporte la placenta a casa después del parto, o programe que Eyla Cuenca Birth pase por ella al hospital en el transcurso del día. La placenta debe de ser refrigerada o congelada adecuadamente previo a su preparación. Si la placenta se preparará dentro de las 72 horas posteriores al parto, entonces puede permanecer en el refrigerador. Sin embargo, si la placenta no se utilizará hasta después de 72 horas después del parto, esta deberá colocarse en la parte posterior del congelador donde la temperatura es mas consistente. 

Si planea tener un parto en casa, pídale a su partera que coloque su placenta en una bolsa doble y la refrigere. El almacenamiento es el mismo mencionado anteriormente. 

Como su proveedor de servicios de placenta, lo ayudaremos con la logística para el gran día y nos aseguraremos de que tenga todos los recursos que necesita para transportar su placenta con éxito. 

¿Cuánto tiempo tomará el proceso?

El proceso suele tardar entre 48 y 72 horas en el caso de las cápsulas de placenta, esto es desde el momento en que se recoge la placenta, hasta que se entregan las pastillas ya listas. 

¿Cómo obtengo mi placenta después del parto?

Si planea tener un parto en casa, su partera generalmente colocará su placenta en una bolsa doble y le preguntará si desea refrigerarla, congelarla o desecharla. Siga las direcciones mencionadas anteriormente como guía para manipulación y almacenamiento de la misma. Es recomendable hablar con su proveedor de atención médica acerca de sus deseos con respecto a la placenta, antes de comenzar el trabajo de parto. 

Si va a tener un parto hospitalario, asegúrese de hablar con su médico con anticipación. Averigüe cuál es la política del hospital para la liberación de la placenta. Dígale a su médico que planea llevar su placenta a casa después del parto. Esto deberá de ser anotado en su expediente clínico y debe mencionarse en su plan de parto. Es posible que también deba firmar una autorización/exención para poder llevarse la placenta a casa. 

¿Cuáles son las diferentes formas de encapsular la placenta?

Ofrecemos dos métodos de preparación: 

Método crudo de deshidratación: la placenta se corta cruda en láminas delgadas previo a la deshidratación. Las mamás que han tomado las cápsulas creadas a base de la placenta han experimentado un gran aumento de energía, con un efecto casi inmediato. 

Método Tradicional: inspirado en el método de preparación de la Medicina Tradicional China (MTC) de cocinar la placenta ligeramente al vapor antes de la deshidratación. Las mamás que han tomado las cápsulas hechas con este método reportan un efecto tonificante o un aumento de energía.

¿Puedo preparar yo misma mi placenta?

¡Claro que sí! Las mujeres y parteras han preparado sus propias placentas durante siglos. 

Si bien, definitivamente usted puede preparar su propia placenta, el contratar a un especialista en artes de la placenta, ayudará a que el proceso antes y después del trabajo de parto sea más alegre y eficiente. 

Cuando las madres están esperando a su pequeño, hay innumerables consideraciones que usted y su familia están haciendo al mismo tiempo. Contratar a un profesional que se ocupe de preparar su placenta, aliviará su carga y le ayudará a crear cápsulas y tinturas las cuales usará durante muchos años. 

para obtener más información o para reservar una sesión prenatal con Eyla, haga clic AQUÍ. Eyla es bilingüe, sin embargo, las consultas son principalmente en inglés.

Si desea convertirse en un especialista en encapsulación de placenta Eyla ofrece una capacitación en inglés, haga clic AQUÍ para registrarse.